lunes, 17 de diciembre de 2007

Guía para sobrevivir en Internet: las reglas de Internet

Con el cambio del siglo hemos asistido a una serie de revoluciones tecnológicas que se suceden con más rapidez que los golpes de estado en según que países africanos. Objetos que antes percibíamos como pertenecientes al ámbito de la ciencia ficción han pasado a formar parte de nuestra vida cotidiana. No solo el mundo que nos rodea ha cambiado, sino que, peor aun, el mundo que nos rodea nos ha cambiado a nosotros. Uno no puede escapar a reflexiones como ésta cuando, esperando a un amigo a la puerta de su casa, en vez de usar el telefonillo le da una llamada perdida, cuando después de grabar con su propio móvil algún incidente especialmente bochornoso se haya a si mismo coqueteando con la idea de colgarlo en el Youtube, o cuando en medio de una conversación surge la temible coletilla: “pues, como digo en mi Blog…”.

Por encima de todas las posibles tecnologías alienantes concebidas por el hombre desde su concepción como raza destaca sin rival aquella llamada Internet. ¡Internet! La sola mención de este nombre produce pavor entre las gentes de bien. Cuesta imaginar una herramienta más terrible que esta y que, en mi modesta y muy sincera opinión, será la causante de nuestro progresivo debilitamiento como raza y postrera extinción.

Hasta ahora en todo el proceso de evolución humana hemos tenido una gran aliada a la hora de desarrollarnos y de convertirnos en los reyes y verdugos de este planeta: la información. El ser humano siempre ha intentado acumular conocimientos que le ayudasen a la hora de llevar sus empresas a buen puerto, ganar más bienes, tomar decisiones acertadas, tener conversaciones inteligentes, dominar el mundo y ligar con el sexo opuesto. Siempre ha habido una selección de la información, y se ha discernido entre lo anecdótico y lo útil, entre lo superfluo y lo esencial, entre lo que vale y lo que no. En los códices medievales no se relata el modo en que el hermano Zacarías le gritó al hermano Guillermo “sois un hijo de una meretriz, maldito bastardo” y la forma en que el susodicho le abrió la cabeza con un taburete mientras dormía por tal afrenta. No, porque eso es superfluo. ¿Quién iba a ganar con tal conocimiento? Ni que decir tiene que mucha gente en aquella época gustaría de saberlo, como no, pero nadie en su sano juicio consideraría que tal hecho merecía ser consignado por escrito. Se hace una selección de la información.

Todo eso ha cambiado. Bien es cierto que esto no empezó exactamente con Internet, pero adquirió un nuevo nivel con él. Ya no hay selección de la información, todo se preserva. ¿Por qué demonios se yo que Ronaldinho está pasando un bajón de forma en el Barça si ni siquiera me gusta el puto futbol? ¿Por qué puedo citar al menos a 4 novios de Ana Obregón si la mera visión de su cara me produce repulsión física? ¿Por qué he sacado un 26% en el Friki test? ¿Quién puso esa información en mi cabeza?

Peor aun, Internet ha sacado a la luz miles de personas que hasta ahora no podían expresar su mensaje con temor a ser rechazados… con razón. Hasta ahora un fulano que, pongamos el caso, creyese firmemente que la luna se hace más y más grande y que deberíamos emigrar a Urano, no se arriesgaba a dar su opinión porque sabía que la gente se iba a reír de él. Sin embargo, ahora, puede crear su propio foro o Blog, y tendrá a no menos de varias decenas de personas tan locas como él que estarán de acuerdo con sus descabelladas teorías y que se retroalimentarán mutuamente. Y a esto le llaman Web 2.0. ¡Gracias Internet!

Pero si algo nos ha enseñado la historia es que adáptate o muere. Así que más lejos de adoptar una postura retrograda y reaccionaria, me propongo abrazar la nueva cultura de Internet y dar unas líneas maestras para el disfrute de la maravillosa Web 2.0. Que demonios, ¡si estoy escribiendo en un blog para menos de una decena de personas!

Como introducción al maravillo mundo de la Web 2.0, allá van algunas de las reglas principales de Internet. Esto puede parecer una bella trampa lógica porque, ¿existirían reglas de ser Internet un sitio tan horrible? La respuesta es si, existen, pero las propias reglas son estúpidas. Repasemos las más importantes:


No hay mujeres en Internet

Es conveniente recalcar esto. NO hay mujeres en Internet. Mucho se ha hablado sobre el tema, e incluso muchas mujeres han afirmado que, efectivamente, navegan por Internet. Pero en todos los casos han resultado ser simples tergiversaciones de la verdad. Las mujeres NO deciden ponerse nicks como “zorracaliente69”, o “tragonacachonda35”. Podéis estar BASTANTE seguros que de encontraros a usuarios con esos nombres, se trata de hombres. Tampoco suelen enviar fotos suyas desnudas vía Messenger tras tres minutos de conversación con un completo extraño.

Existen, por otra parte, rumores por Internet (por tanto poco fiables) de que esto podría no ser así. Algunos apuntan a que la aparente ausencia de mujeres en Internet se debe a la actitud abiertamente “afectiva” y “desinhibida” de muchos hombres hacia las supuestas mujeres de Internet. Esto supondría que, teóricamente, muchas mujeres se harían pasar por hombres en la red. No entraré a valorar estos disparates.

Sea lo que sea, hay porno de ello (regla 34)

Quizás uno de los pilares de Internet. La red se creó como un experimento militar para una comunicación rápida y eficiente en el campo de batalla. Cuando esta invención llegó a manos civiles, inmediatamente agudas mentes y avezados líderes visionaron revolucionarios proyectos y útiles contenidos que cambiarían las sociedades para siempre. A día de hoy Internet se usa para bajarse porno y películas pirata.

La regla 34 afirma que, sea cual sea el tema, habrá porno en Internet de ello. No, en serio. Lo que sea. ¿Qué no? La mente humana por definición busca siempre la bondad, algo puro y bueno donde refugiarse. Cuando todo falla, intentamos la racionalización. Luego, fallando eso, somos irracionales. Pero nada cambia el hecho en si. La regla 34 se cumple.

Pensemos en una gran serie de nuestra infancia. Una que represente para nosotros los valores en los que hemos sido educados. Pues podemos tratar de taparnos los oídos y gritar “¡No puede ser, no puede ser!”, que hay porno con sus personajes en Internet. Y alguien disfrutará con el. Ej:

-Los pitufos:

-Super mario:

-Alf:

-Piezas de tetris (WTF):

-Hitler (¡¡¡¡¿¿¿¿¿WTF??????!!!!):




Sea lo que sea, a alguien en la red le excita

No es simplemente una prolongación de la regla 34, sino la constatación de una terrible realidad: la gente es proclive a satisfacer y hacer gala de sus filias en Internet con más frecuencia de lo que se cambian de ropa interior. Todo, repito, todo es susceptible de ser la filia de alguien. ¿Zapatos de tacón? Si ¿Globos? Si ¿Bañarse vestido con traje de ejecutivo? Si.

Y así hasta el infinito. La moraleja: nunca cuelgues fotos tuyas en Internet: alguien se la menearía con ellas.


Si no hay fotos, nunca ocurrió

Dada la naturaleza de Internet, la mayoría de la gente que la puebla son desalmados embusteros que contarían cualquier cosa para ganarse el favor de sus congéneres de Internet y de las “mujeres” de Internet. Puesto que cualquier individuo anónimo puede afirmar lo que sea ante completos desconocidos sin que para estos sea evidente la falsedad de su declaración, suele ser habitual incluir algún tipo de prueba documental que acompañe al testimonio. Ya puede ser ésta en forma de foto o de video; lo importante es demostrar que eso sucedió de verdad. Tanto es así que es más seguro asumir que cualquier cosa escrita es falsa y si luego se demuestra que es verdad, pues ya se verá.


La popularidad de una determinada página NUNCA indica su calidad

Esto es aplicable en muchas ocasiones a la vida real, pero en Internet una cosa va con la otra. Si una página es popular será una basura. Eso no quiere decir que una poco visitada sea mejor; de hecho será incluso peor. La moraleja de estos dos enunciados dejo que la saque quien lea estas líneas. Ej:

-Myspace: Nido de narcisistas con tendencias esquizoides
-Craiglist: Nido de pervertidos con tendencias homicidas
-Youtube: Nido de exhibicionistas con tendencias violentas
-Blogger: Nido de listillos con tendencias maníacas


Todos los foros de Internet son ciénagas de podredumbre. No visites ninguno.

Los foros de Internet se crearon para favorecer el libre intercambio de ideas y puntos de vista con el objetivo de crear una dinámica de debate enriquecedora para todos los implicados. No es así: son lugares desorganizados, moderados por dictadores, y poblados por quinceañeros con cantidades de tiempo libre infinito. La mayoría de ese tiempo lo dedican a postear tonterías, insultarse unos a otros o trollear. Otra cosa curiosa de los foros es que la gente tiende a escribir en ellos como quien escribe un mensaje de texto de móvil, y evitan leer largos párrafos aduciendo que “era muy largo”, con lo cual suelen preguntar cuestiones que están resueltas en las primeras líneas del hilo. Y yo me pregunto, ¿para que están en Internet si no es para leer? ¿Acaso esperaban que se lo recitase la CPU? Internet esta hecho de texto, texto, texto, maldita sea. Bueno, y de porno. De eso también hay en los foros.

Si tienes valores morales, te enfadarás mucho. Guárdalos en un cajón mientras navegas.

El propio concepto de Internet es ofensivo. Sus contenidos aun lo son más. Sean cuales sean tus creencias, siempre habrá algo que consiga enajenarte lo suficiente como para querer golpear la pantalla con el teclado. Respira hondo. En primer lugar es TU pantalla y TU teclado, así que quieto. En segundo lugar no discutas, no comentes, no critiques. Déjalo pasar. Tomar partido por tu parte hará que crezca. Y tercero, si decides escribir algo, hazlo de forma casual, incluso torpe. Ej:

Situación:

Ves un video de Youtube en el que sale Jesús luchando con unos vampiros

Respuesta inapropiada:

¿Cómo es posible que haya gente tan desalmada como para bromear con temas tan serios? Debería daros vergüenza gandules, ¿Jesús murió por nuestros pecados y así os reís de Él? Espero que ardáis en el infierno como os merecéis (seguido de una cita bíblica).

Respuesta apropiada:

Jesús lol.

P.D: Quién haya posteado esto es gay.



Y estos son los principios básicos que debéis tener en cuenta cuando naveguéis por Internet. Otro día ya continuaré con más consejos, ya me he extendido una barbaridad. Hasta la vista progenie.

3 comentarios:

Paiaso de Asalto dijo...

Moi boa, é perfectamente verídico. Internet é a proba de que hai xente con demasiado tempo libre! menos mal que aínda queda xente que se preocupa polo que realmente importa e publica novas interesantes e decentes; por exemplo, este blog, onde nunca crearemos entradas "frikies", cotilleos, links a youtube, etc... SI SEÑOR!!! NOSOTROS MOLAMOS, LOL!!!! RESTO DE INTERNET CACA, POPÓ, BLUFF!!!!

EL OBISPO dijo...

La planta siempre aportando negativamente contra la tecnología. Aunque razón no le falta…..no hay mujeres en Internet(hay payasos, patos y plantas, pero no mujeres. De hecho las suegras tienen más bigote que Adama en tiempos de guerra)
Grandes videos planta: el de los pies es fantástico y el del baño vestido también. Entre los dos suman los diez minutos de maravilloso arte moderno. Viva youtube.
P.D: que coño es LOL?

Planta en un tiesto dijo...

"lol" es otro de los males endemicos que Internet ha traido a la juventud. Es el acronimo de "laughing out loud" o "riendo en voz alta". Mientras que en la infancia de Internet lol se usaba cuando REALMENTE algo te hacía gracia, ya no es así, y de hecho se usa en cualquier situación. Ej:

-Hola, lol (entrando en un chat)
-looooooool (cuando alguien dice alguna tonteria en un juego online)
-¿Que lol es esto? (Preguntando por algo)
-¿lol? (mostrando incredulidad)

Y así hasta el infinito. Mmm, esto podría dar para un buen artículo... lol